Cuando yo me vaya,
No cortéis flores para el campo santo,
No derraméis lágrimas por mí,
No alberguéis tristeza en el corazón,
Ni sintáis aflicción en vuestra alma.
Me iré en paz,
Sabiendo que hice todo lo que quería,
Dejando más amigos que enemigos,
Me iré sonriendo, sin odio, con amor,
Y con la certeza de que ha merecido la pena.
Cuando yo me vaya,
Disfrutar de cada momento,
De cada segundo,
Sin reproches, ni rencores,
Sin envidias, ni egos,
Sabiendo perdonar a quien pide perdón,
Pues la vida es muy corta para vivirla enfadados.
Cuando yo me vaya,
Sembrar un árbol en el jardín,
Un magnolio con sus flores con olor a limón,
Enterrar en sus raíces mi nombre,
Y recordarme siempre por quien fui, por los momentos a mi lado,
Y no por lo que otros cuentan de mi vida.
Cuando yo me vaya,
No cortéis flores para el campo santo,
No derraméis lágrimas por mí,
No alberguéis tristeza en el corazón,
Ni sintáis aflicción en vuestra alma.
No hay comentarios:
Publicar un comentario