LOS RESTOS DEL NAUFRAGIO

Esta frágil mirada de mirarnos y perdernos,

de los años que arrastra la nostalgia,

y que poco a poco devora la rutina,

intentando recomponer el alma,

recogiendo pedazo a pedazo los restos del naufragio,

que aún quedan en la playa de la locura.

Me miras y te miro sin reconocernos,

los años se han borrado de tu memoria y de la mía,

y por el camino cruel e indiferente del olvido,

caminan en direcciones opuestas nuestras vidas,

hacia un final distintos donde las noches no sean frías,

hacia un final distinto donde las mañanas no sean mudas.

El tiempo se ha llevado y ha borrado las promesas,

las palabras que antaño producían sonrisas,

hoy producen reproches y lágrimas,

hoy producen tristeza y dolor,

haciendo que hoy el corazón se niegue a sufrir más,

todo aquello que construimos, hoy se derrumba como si el cielo,

cayera de golpe y sin aviso sobre nuestras cabezas.

De nada sirven las lágrimas,

cuando se ha partido en pedazos el alma,

cuando el deseo se suicidó en un rincón,

y la pasión salto suicidándose por la ventana,

para huir en busca de una nueva ilusión,

que devuelva a la vida aquello que asesino nuestra indiferencia,

pisoteando nuestro respeto y apuñalo nuestro corazón.

Esta frágil mirada de mirarnos y perdernos,

de los años que arrastra la nostalgia,

y que poco a poco devora la rutina,

intentando recomponer el alma,

recogiendo pedazo a pedazo los restos del naufragio,

que aún quedan en la playa de la locura.