Aquí parado miro al infinito,
Buscando vida en cada segundo,
En este cruce de caminos,
Dentro de mi bendita locura,
Sin saber si dar otro paso,
O en qué dirección volar.
Mírame aquí en el centro de esta cruz,
Sin decidir si a derecha o izquierda,
Si hacia adelante o hacia detrás,
Si rojos, verdes, azules o blancos,
Si vida, muerte o inmortalidad,
Sí carretera, camino o barranco.
Infame tiempo que devoras mis segundos,
Clavándome a la cruz que reclama mi cuerpo,
Y en este baile obsceno de sentirme libre,
Soy consciente de que aún soy un esclavo,
Esclavo de esta sociedad que mata y margina.
Solo me queda un camino,
Ir hacia adelante esperando que el viento,
Por fin cambie todo aquello que odio,
Todo aquello que detectó y me hace daño,
Espero que el futuro esté la respuesta,
Esa respuesta a las preguntas que atormentan mi corazón.
Aquí parado miro al infinito,
Buscando vida en cada segundo,
En este cruce de caminos,
Dentro de mi bendita locura,
Sin saber si dar otro paso,
O en qué dirección volar.
Aquí estoy donde mis sombras aguardan.
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