EN EL BAÚL DEL NO RECUERDO

Otro año más que se nos va como agua entre los dedos,
mientras cada vez nos cuesta más la vida,
otro año más para guardar en el baúl del no recuerdo,
dejando atrás los malos momentos que nos fusilan sin piedad,
otro año más para borrar del calendario.

Otro año con más penas que alegrías,
de momentos agridulces y duros,
intentando levantar la cabeza, pero amarrados al suelo,
otra vez golpeados por la realidad sin remedio,
esa que nos tapa la boca cada día,
otra vez sin vivir de pie, otra vez viviendo de rodillas.

Otro año de colas con hambre,
de pan solo para algunos,
de casas sin luz y frío en invierno,
otro año de sociedad rota y sin corazón,
dejando a más de la mitad en el camino,
sin motivo, sin remordimiento y sin razón.

Otro año más de sin sentidos,
de golpes en el pecho infundados,
de a mí no mejor al vecino,
de mirar hacia otro lado,
otro año más que nos ha vencido,
otro año más que nos ha enterrado.

Otro año más de alambradas de espinos,
de fronteras puestas al alma y al corazón,
otro año más de palabras y caretas,
otro año más sin pedir perdón,
otro año más de mentiras,
otro año más que paso.

Otro año más que se nos va como agua entre los dedos,
mientras cada vez nos cuesta más la vida,
otro año más para guardar en el baúl del no recuerdo,
dejando atrás los malos momentos que nos fusilan sin piedad,
otro año más para borrar del calendario.

YA SE ENCENDIERON LAS LUCES

 

Ya se encendieron las luces,

vuelve el tiempo de enterrar a la tristeza,

de Navidad se visten las calles,

y recordamos a quienes ya no están,

brindando como siempre por haber compartido su tiempo.

Ya se encendieron las luces,

en este año agridulce que se va,

otro año de pandemia y mascarilla,

de fiestas a medias y pesares en el alma,

otro año más al que cuesta echarle una sonrisa.

Ya se llenan las plazas,

ya se llenan los mercados y los centros comerciales,

como si no hubiese un mañana,

como si nada hubiese pasado,

que pronto olvidamos la historia,

esa que se escribe desde hace apenas unos años.

Ya se encendieron las luces,

y con ellas caen las lágrimas,

lágrimas de ausencia o bienvenida,

ya llegan los abrazos infinitos,

ya llegan los besos que se dan con el alma,

y las familias se reúnen para cenar de nuevo,

o simplemente se ven por videollamada.

Ya se encendieron las luces,

vuelve el tiempo de enterrar a la tristeza,

de Navidad se visten las calles,

y recordamos a quienes ya no están,

brindando como siempre por haber compartido su tiempo.

HOY SORPRENDÍ A LA LUNA

 

Hoy sorprendí a la luna,

y en un acto de valentía la atrape,

era de escarcha blanca y pura,

como tantas veces soñé,

hoy atrape a la luna,

para ponerla a tus pies.

Hoy sorprendí a la luna,

y en un acto de valentía la atrape,

jugaba despistada entre ramas,

embobada con un roble,

no se dio cuenta que la miraba,

y sobre ella me abalance.

Hoy sorprendí a la luna,

y en acto de valentía la atrape,

a penas despertaba el día,

la noche cerraba el ayer,

corrí nervioso con ella a casa,

para cumplir lo que un día te jure.

Hoy sorprendí a la luna,

y en acto de valentía la atrape,

casi me cuesta la vida,

casi me dejo la piel,

casi me roba hasta el alma,

casi me hace enloquecer.

Hoy sorprendí a la luna,

y en un acto de valentía la atrape,

era de escarcha blanca y pura,

como tantas veces soñé,

hoy atrape a la luna,

para ponerla a tus pies.

SUFRIR O MORIR

Escúchame,
no sirve de nada lamentarse,
la noche llega tan oscura como la tarde,
y ya nada tiene sentido, nada es real,
todo se desvanece, ya nada existe.

Levántate de ese rincón,
no dejes que la vida te arrincone,
mira hacia la puerta sin miedo,
aunque sabes que si la cruzas,
solo encontraras un precipicio,
solo encontraras la nada.

Nada es diferente ahora,
ya no quedan sonrisas,
los días son todos iguales,
una repetición tras otra de las sobras,
que desde hace tiempo arañan tu piel,
y van violando sin permiso tus días.

El tiempo es una quimera,
apenas tienen sentidos los segundos,
ya nada cuenta, nada importa,
la presión es tan insoportable, tan dolorosa,
no hay salida, sufrir o morir,
ya nada te ata a esta realidad.

Hace tiempo perdiste la noción,
la luz fue apagándose en el alma,
no hay futuro en tu hoy,
no hay futuro en tu mañana,
y de aquel pasado solamente quedan tinieblas.

No tengas miedo salta al vacío,
yo acompaño tu vuelo,
te juro que será el último,
te juro que después de eso,
ya no sentirás más dolor.

Mírate en el espejo,
hay estoy justo al otro lado,
mirándote como tú a mí.

EQUILIBRIO

Un latido, el primero,
Comienza la rueda del tiempo,
Abre los ojos el mundo espera,
Hoy comienza el viaje infinito,
Que ha de llevarte por el camino de la eternidad.

No temas a la luz,
Solo es el equilibrio que guiará tu corazón,
El camino a veces será doloroso,
Pero no te arrodilles, sigue tus pasos,
Las montañas más altas son para escalarlas.

Vive, llora, ríe, pero no te rindas,
Las batallas más grandes son las más duras,
Pero no son las que deciden la guerra,
Tú sabes bien lo fuerte que eres y serás,
Solo has de creer en ti, en tu alma.

No tengas miedo,
Salta al principio de los días,
Recorre el sendero solo o en compañía,
volverá el principio y volverá el final,
Y así será una y otra vez sin parar,
Hasta el final de la existencia.

La rueda del tiempo gira,
Gira sin detenerse nunca,
Y lo que hoy es ayer, ayer será hoy,
En un baile perfecto entre el ayer y el mañana,
Que dará equilibrio al presente que vives.

RESPUESTAS

 

Aquí parado miro al infinito,
Buscando vida en cada segundo,
En este cruce de caminos,
Dentro de mi bendita locura,
Sin saber si dar otro paso,
O en qué dirección volar.

Mírame aquí en el centro de esta cruz,
Sin decidir si a derecha o izquierda,
Si hacia adelante o hacia detrás,
Si rojos, verdes, azules o blancos,
Si vida, muerte o inmortalidad,
Sí carretera, camino o barranco.

Infame tiempo que devoras mis segundos,
Clavándome a la cruz que reclama mi cuerpo,
Y en este baile obsceno de sentirme libre,
Soy consciente de que aún soy un esclavo,
Esclavo de esta sociedad que mata y margina.

Solo me queda un camino,
Ir hacia adelante esperando que el viento,
Por fin cambie todo aquello que odio,
Todo aquello que detectó y me hace daño,
Espero que el futuro esté la respuesta,
Esa respuesta a las preguntas que atormentan mi corazón.

Aquí parado miro al infinito,
Buscando vida en cada segundo,
En este cruce de caminos,
Dentro de mi bendita locura,
Sin saber si dar otro paso,
O en qué dirección volar.

Aquí estoy donde mis sombras aguardan.

DOS MINUTOS UNA VIDA

 

Que más me da esperarte dos minutos,
que más me da esperarte una vida,
si lo más importante es el latido,
ese que dos corazones convierten en uno,
caminando en la misma dirección.

Aquí con los pies en el suelo,
te espero para desplegar las alas,
y viajar contigo hasta el mundo de los sueños,
que esta noche nos espera debajo de las sabanas,
y a altas horas de esta madrugada espero que lo eterno,
nos lleve hasta la libertad de nuestros cuerpos.

En cada centímetro de tu piel quiero celebrar la vida,
como si el mañana no existiera entre estas cuatro paredes,
y aquí en esta batalla de besos y saliva,
espero ganar y que ganes esta guerra de la pasión sin límites,
qué dicta al oído de la locura el deseo.

No tengas miedo de entregarte por completo,
como yo me entrego por completo a ti,
con la sensación de que me sobra todo,
que me sobra hasta la piel, esperando que en ti y en mí,
nuestras almas se fundan con el roce de nuestros labios.

Salta al vacío conmigo,
déjate caer en el abismo de la inconsciencia,
y así morir en el estasis más profundo,
sin poner fronteras a la locura,
que nos lleva a gritar de placer y satisfacción.

Déjame llevarte de la mano,
hasta la fuente de la vida,
más allá de cualquier paraje conocido,
para junto a ti redescubrir sin palabras,
lo grande que es el respeto, lo grande que es el amor.

EL CAMINO MÁS LARGO

 

No sé en que momento perdí el horizonte,
como ayer aquí estoy hoy divagando,
quisiera cambiar mi presente,
quisiera cambiar mi pasado,
pero ya no está en mis manos.

Como siempre,
elegí el camino más largo,
y a lomos de un caballo blanco que me devora,
voy galopando hacia lo eterno,
y ya las palabras no sirven de nada.

Aunque siempre he preferido aprender por las malas,
me hubiese gustado tener más paz,
y que la vida me hubiese dado más cancha,
y en este proceso de nacer y morir,
lo más bonito ha sido sentir amor y libertad.

Hoy he decidido elegir,
y aunque el cuerpo me pide terminar,
he elegido luchar y vivir,
y aunque sé que una bala lleva grabado mi nombre,
he decidido tomar el camino más largo.

Mírame como tantos otros,
aquí estoy al principio de un nuevo principio,
empezando a recorrer el camino más largo,
que al final siempre será mi meta,
esa meta que me lleva hasta el corazón.

MUERE EL POETA

Muere el poeta,
se le secó la prosa,
se le ausentaron las letras,
se terminó la tinta,
y le huyeron las musas.

Muere el poeta,
sentado en su silla,
mirando a la puerta,
se le ausentó el alma,
pensando en ella.

Muere el poeta,
entre lagrimas, alegrías y tristeza,
entregando la vida,
persiguiendo sus metas,
soñando la rima.

Muere el poeta,
en campos de amapolas,
en la tristeza del invierno,
en la colorida primavera,
en el cobrizo del otoño,
y en el calor del verano.

Muere el poeta,
entre alegrías y tristezas,
en el baldío folio en blanco,
que no quiere ya llevar sus huellas,
mientras absorto sigue mirando,
la ventana que sigue abierta.

Muere el poeta,
se le secó la prosa,
se le ausentaron las letras.

TERMINA NUESTRO TIEMPO

 

Si te digo la verdad,
no sé si merece la pena luchar,
el mundo se va a la mierda,
mientras míranos aquí, mirando hacia otro lado,
sin nada que hacer, sin nada que decir, sin nada más,
sin palabras, sin manos, sin libertad.

Si te digo la verdad,
no sé si esto es el fin de los días,
si la luz vencerá de nuevo a la oscuridad,
solo sé que yo vi mi principio y veré mi final,
y mientras tanto habrá mil verdades que contar,
y miles de personas gritaran de dolor.

Si te digo la verdad,
se termina nuestro tiempo,
y todo volverá a ser lo que fue un día,
al principio de los tiempos donde la tierra era virgen,
cuando el hombre aún no había corrompido su dignidad,
y no existía aún el poder, ni el dinero.

Si te digo la verdad,
las palabras ya no sirven,
seguimos talando árboles, deforestando el Amazonas,
extinguiendo animales racionales,
y dejando vivo al mayor parasito que es el hombre,
qué es capaz de acabar con todo sin entender qué acaba con el mismo.

Si te digo la verdad,
no sé si merece la pena luchar,
el mundo se va a la mierda,
mientras míranos aquí, mirando hacia otro lado,
sin nada que hacer, sin nada que decir, sin nada más,
sin palabras, sin manos, sin libertad.

OPORTO

 

Sentado en la orilla del Duero,
Miró embobado el puente de Don Luis primero,
Al otro lado en la Gaia sube y baja el teleférico,
Mientras los barcos Rabelos remontan el río.

Cierro los ojos un instante,
Y me dejó llevar en tu tranvía,
Me bajo para pasear por tus calles,
Recorro la avenida Dos Aliados,
Y subo hasta la Iglesia de los Clérigos,
Para ver Oporto desde su campanario.

Callejeo un instante hasta la librería Lello,
Y me quedo sobrecogido por su belleza,
Decido desandar mis pasos hasta San Bento,
Me pierdo en tus rincones y cuestas,
Y decido sin prisas tomarme un café en Magectic.

Retomo mi caminar hasta tu catedral,
Me siento pequeño ante la Sé de Oporto,
Casi es la hora ya de comer y bajo tus calles hasta tu rivera,
Me siento y pido un caldo verde Y
también una Francesinha,
Mientras de fondo se oye un Fado.

La tarde me sorprende paseando,
Todo Oporto se llena de Magia,
La noche me invita al recuerdo,
Mientras ceno en una terraza,
Un plato de bacalao a bras y una buena copa de Porto.

Sentado en la orilla del Duero,
Miró embobado el puente de Don Luis primero,
Al otro lado en la Gaia sube y baja el teleférico,
Mientras los barcos Rabelos remontan el río.

PORTO

Sentado nas margens do Duero,
primeiro olhei pasmo para a ponte Don Luis,
Do outro lado da Gaia o teleférico sobe e desce,
Enquanto os barcos de Rabelos sobem o rio.

Fecho os olhos por um momento,
E deixo-me levá-lo no teu eléctrico,
desço para passear pelas tuas ruas , passo pela
avenida dos Aliados,
E subo à Igreja dos Clérigos,
Para ver o Porto desde a sua torre sineira.

Caminho por um momento até a livraria Lello,
E fico maravilhado com sua beleza, decido
refazer meus passos até São Bento,
me perco em seus cantos e ladeiras,
E decido sem pressa tomar um café em Magectic.

Retomo o meu passeio à tua catedral,
sinto-me pequeno em frente à Sé de Oporto,
Está quase na hora de comer e desço as tuas ruas até à tua margem,
sinto que te peço um caldo verde E
também uma Francesinha,
Enquanto ao fundo ouve-se um Fado.

A tarde surpreende-me a caminhar,
Todo o Porto enche-se de Magia,
A noite convida-me a recordar,
Enquanto janto na esplanada,
Um prato de bacalhau grelhado e um bom copo de Porto.

Sentado nas margens do Duero,
primeiro olhei pasmo para a ponte Don Luis,
Do outro lado da Gaia o teleférico sobe e desce,
Enquanto os barcos de Rabelos sobem o rio.

SOY, SOLAMENTE SOY TIEMPO

 

Soy el sendero recorrido,
una gota de agua en el tiempo,
la escarcha en el invierno,
el agua fresca en verano,
la flor en la primavera,
y la hoja cobriza en otoño,

Soy el llanto recién nacido,
la palabra que llega al oído,
el renglón que dibuja un poema,
el corazón que se entrega al amor,
las alegrías y las penas,

Soy el mar dibujando la arena,
el infinito que separa el cielo y la tierra,
la piedra y el polvo del camino,
el sol, la luna y las estrellas,
el caminante, el nómada, el paria,
soy noche calurosa, soy noche nublada.

Soy los ojos, la sonrisa, una mirada,
el tren que llega, el barco que marcha,
una estación de paso, una casa con ventanas,
el alma que ocupa una morada,
la distancia en el recuerdo y también las lágrimas.

Soy carne y huesos,
sentimientos y emociones encontradas,
un mudo lleno de sueños,
una cabeza llena de canas,
un segundo que me mantiene despierto,
soy tarde, soy noche y soy mañana.

Soy, solamente soy tiempo.

UN ÁNGEL ANDA SUELTO (Dedicado a Marta) (02,10,2021)

 

Un ángel anda suelto,
Ha dejado por un día sus alas,
Ha pintado de colores el día,
Paseando por esta tierra,
Con su alma pura y blanca.

Un ángel anda suelto,
Yo lo he visto esta mañana,
Con un vestido de primera comunión,
Dando pasos como si nada,
Para ir a comulgar con Dios.

Un ángel anda suelto,
Atiende al nombre de Marta,
Con su sonrisa contagiosa,
Con su alegría desbordada,
Iluminando todos los rincones,
Dibujando sus pisadas.

Un ángel anda suelto,
Yo he podido abrazarla,
Incluso me ha dado un beso,
Y me ha mirado con picardía,
Mientras sonaban las campanas.

Un ángel anda suelto,
Ha dejado por un día sus alas,
Ha pintado de colores el día,
Paseando por esta tierra,
Con su alma pura y blanca.

FRAGÍL

 

Este barco hundido hace un tiempo,
ya no encuentra la playa de tu piel,
y por mucho que intento salir del fondo,
no consigo ver la luz, ni llegar a la superficie.

Ya no tengo fuerzas para seguir,
todo se me hace tan cuesta arriba,
que se me hace difícil respirar y vivir,
atado al ancla que me tiene amarrado al fin.

Ya no cabe más tristeza en este cuerpo,
ni menos esperanza en esta alma,
que puedan dañarme más de lo que ya me he dañado,
y se me clavan cada una de las palabras que han acabado con lo eterno.

Frágil, me siento tan frágil,
que apenas me reconozco en el espejo,
que apenas me reconozco en mis días,
y que ya ni siquiera me importa el tiempo,
y que ya ni siquiera me importa esta vida.

Este barco hundido hace un tiempo,
ya no encuentra la playa de tu piel,
y por mucho que intento salir del fondo,
no consigo ver la luz, ni llegar a la superficie.

¿Y AHORA QUÉ?

 

¿Y ahora qué? ¿Y ahora porque?
Que le digo a mi corazón,
Que hago sin verte entrar más por la puerta,
Como hago para que el día vuelva a ser un segundo.

Porque la vida es así de injusta,
Porque en este momento,
De repente todo se ha vuelto oscuridad,
Que hay del futuro que habíamos planeado juntos,
Qué hay de la vida, de nuestro hoy, que le digo a nuestra hija.

¿Y ahora qué? ¿Y ahora porque?
Porque me quedo sin tus palabras,
Porque no puedo disfrutar más de tu sonrisa,
Porque me quedo sin tus abrazos,
A quien le pido yo ahora tus besos,
A quien le cuento ahora mis cosas.

¿Y ahora qué? ¿Y ahora porque?
Como recompongo mi corazón hecho pedazos,
Como le explico a mi alma que le falta su mitad,
Como superó yo la ausencia que has dejado,
Como hago para seguir sin ti, para seguir sin mí.

Dime cómo hago para que la vida vuelva a ser vida.

CUARENTA SUEÑOS

 

Recogió sus cosas y se dispuso a viajar,
miro al horizonte y lo llamo libertad,
y aquella noche en plena oscuridad,
empezó andar y empezó a soñar,
con un mundo nuevo, con una oportunidad,
y con vivir sin miedo el mañana.

En la mañana miro al sol y sonrió,
ya estaba al lado del mar,
se arrodilló en la playa y miro al cielo,
y por primera vez en su vida sintió paz,
y le dijo a su dios ayúdame señor.

Lloro como si fuera un niño,
y miro al infinito que divide agua y cielo,
hay estaba su lugar para ser feliz y cumplir su sueño,
solo el mar lo separaba de tan ansiada meta,
y de conseguir una vida mejor.

Cargo lo poco que tenía en aquel cayuco,
y junto a treinta y nueve personas más se dispuso a volar,
dejo atrás las cadenas que por haber nacido donde nació,
le había puesto el destino, le había puesto la vida,
y por primera vez se permitió sentir alegría, y suspiro.

Hoy las noticias abren con un trágico suceso,
un cayuco lleno de personas se hundió,
y esas personas que tenían nombre y apellidos,
hoy solo son números en una estadística tenebrosa de muertos,
hoy cuarenta sueños murieron en el Mar Mediterráneo,
mientras el mundo incivilizado miraba hacia otro lado.

CON PASIÓN

 

He vivido cada instante con pasión,
me deje llevar por los detalles,
y en cada amanecer me tome mi tiempo,
para ver al sol nacer, para ver a la luna morir,
y siempre fue viviendo con intensidad la magia de cada segundo.

No me arrepiento de los pasos que di,
pues de cada uno aprendí y me hicieron quien soy,
con mis luces y mis sombras, pero al final,
creo que conseguí ser yo y vivir,
con libertad, amor, respeto y dignidad.

Nuca tuve dobleces para nadie,
y a todo el mundo lo trate por igual,
y si me equivoque alguna vez,
pedí perdón y perdone a los demás,
sin guardar jamás odios, ni rencores.

Como a ti que me lees,
me toco el amor y el desamor,
sentí felicidad, dolor, volar y caer,
pero lo volvería a repetir porque fueron momentos,
momentos únicos amigo mío que jamás volverán.

Nace otro día más,
y hasta al fin viviré con emoción,
cada momento que me depare la vida,
y beberé sorbo a sorbo mi eternidad sin temor,
pues allá donde me lleve el destino, iré en paz.

He vivido cada instante con pasión,
me deje llevar por los detalles,
y en cada amanecer me tome mi tiempo,
para ver al sol nacer, para ver a la luna morir,
y siempre fue viviendo con intensidad la magia de cada segundo.

UN NUEVO DIA

 

Esta noche hermanos no tengáis miedo,
aunque las puertas del infierno sean enormes,
sois hombres dignos, valientes y llenos de valor,
mirarlos bien, creen que esos muros les protegen,
pero yo os digo que cuando nazca un nuevo día seremos inmortales.

Esta noche les haremos ver que el cielo también puede arder,
y que nada les va a proteger de la ira de Roma,
mirarlos bien pues son salvajes que se creen Dioses,
pero no hay más dioses que los romanos, ni más Dios que Cesar,
y hoy la novena va a mostrar al mundo porque somos tan grandes.

No temáis soldados, aplacar vuestros nervios,
hoy Julio Cesar luchará a nuestro lado,
y mañana esta tierra será parte de nuestro imperio,
pues nada puede detener el progreso,
y el progreso y la libertad solo residen en senado.

Recordar que sois hijos de Rómulo y Remo,
y que por vuestro cuerpo corre la sangre de aquella loba,
que un día le dio de mamar para hacerlos fuertes,
y aullar conmigo hermanos, que sepan esos Galos,
que hoy se enfrentan a su muerte, pues hoy a sus puertas hay hombres,
que no le temen a la muerte y que no le temen al dolor.

Esta noche hermanos no tengáis miedo,
aunque las puertas del infierno sean enormes,
sois hombres dignos, valientes y llenos de valor,
mirarlos bien, creen que esos muros les protegen,
pero yo os digo que cuando nazca un nuevo día seremos inmortales.

HOY DEBERÍAS ESTAR AQUÍ

Hoy estoy pensando en ti,
y aunque no sé donde estás,
hoy deberías estar aquí,
y aunque quizás estés en otros labios,
jamás te voy a olvidar.

Hoy estoy pensando en ti,
sabes bien que eres mi mitad,
y aunque el destino no piense así,
tú sabes cuál es nuestra verdad,
y sin en esta vida no es, habrá que esperar.

Hoy estoy pensando en ti,
como siempre una vez más,
aquí acompañado por la soledad,
en este lugar donde fuimos felices,
y nos juramos la eternidad.

Hoy estoy pensando en ti,
en silencio viendo la vida pasar,
mientras el cielo no deja de llorar,
viendo como un alma se hace pedazos,
y cada pedazo camina hacia otro lugar.

Hoy estoy pensando en ti,
y te digo la verdad,
hoy deberías estar aquí,
junto a mí, para no irte jamás.

LO POCO QUE QUEDA DE MI.

Cuando tú quieras puedes pasar a buscarme,
ya estoy listo para partir sin miedo,
me encontraras en el lugar de siempre,
con valor, sin reproches y sin odios,
ven y recoge lo poco que queda ya de mí.

Cuando tú quieras puedes pasar a buscarme,
te esperaré sin temor y con respeto,
no te pediré nada, salvo irme en paz y sin dolor,
y en el camino por donde me guíes seguiré tus pasos,
sin mediar palabras, sin quejas, sin mirar atrás,
y sin pedir al futuro que se cumplan mis sueños,

cuando tú quieras puedes pasar a buscarme,
me iré contigo sin nada, sin equipaje,
y más allá donde tú me lleves,
iré con mis manos vacías, sin lágrimas, sin rencores,
pues ya viví todo lo que he de vivir y es tarde,
pues te diré que simplemente quiero sentirme libre.

Cuando tú quieras puedes pasar a buscarme,
mi mano está tendida para enlazarse a la tuya,
y un último suspiro de aquel que no teme a la muerte,
mis labios esbozaran una última sonrisa,
y te miraré por primera y última vez,
antes de decir adiós a todo lo que conozco y a esta vida.

Cuando tú quieras puedes pasar a buscarme,
ya estoy listo para partir sin miedo,
me encontraras en el lugar de siempre,
con valor, sin reproches y sin odios,
ven y recoge lo poco que queda ya de mí.

UN SUSURRO EN LA TORMENTA

Lejano tan lejano como el olvido,

Lejano tan lejano como la indiferencia,

Y en la intensidad de este segundo,

Aquí sigo inerte abrazado a la soledad.

Un susurro en la tormenta,

Que descarga su ira en mi corazón,

Las palabras atraviesan mi alma,

Como cuchillos afilados que profanan la carne.

Me rebeló contra estas cuatro paredes,

Y está cárcel hecha de piel y huesos,

Nada retiene mi pensamiento está tarde,

Ni mis ganas de volar hacia la libertad.

No pretendo buscarme en el pasado que no existe,

Hace tiempo partí hacia el punto que separa el infinito,

Dejando atrás las cargas mundanas de mi ayer,

Sin importarme en qué esquina me espere la muerte.

Me pierdo en el sonido hipnotizante de la lluvia,

Mientras los truenos profanan a ratos mis oídos,

Mientras observo la calle por donde hace mucho partió mi vida,

sin despedirse y sin decirme adiós.

Lejano tan lejano como el olvido,

Lejano tan lejano como la indiferencia,

Y en la intensidad de este segundo,

Aquí sigo inerte abrazado a la soledad.