Ya no busco noches de piel en
compañía,
ni busco un colchón donde nacer o morir,
nunca diré que esta boca no es la mía,
ni he perdido en el camino el mes de abril.
nunca diré que esta boca no es la mía,
ni he perdido en el camino el mes de abril.
Ya no escribo poemas para princesas,
si fui príncipe azul ya desperté y desteñí,
los malos ratos los olvide mientras dormía,
ya no me queda intacto ni mi ajado pedigree.
si fui príncipe azul ya desperté y desteñí,
los malos ratos los olvide mientras dormía,
ya no me queda intacto ni mi ajado pedigree.
La casa que habito no cabe en mis
sueños,
el paraíso no tiene en ella ya una habitación,
de repente pase de ser joven a ser viejo,
traicionado y asesinado por un reloj.
el paraíso no tiene en ella ya una habitación,
de repente pase de ser joven a ser viejo,
traicionado y asesinado por un reloj.
Los trenes ya no me llevan a ninguna
parte,
siempre estoy en la hora de partir,
quizás la muerte me encuentre rendido y cobarde,
y el presente a medio vestir.
siempre estoy en la hora de partir,
quizás la muerte me encuentre rendido y cobarde,
y el presente a medio vestir.
Los días pasan entre el ayer y el
mañana,
la vida nada en un vaso de alcor,
a mi azotea le han salido ya las canas,
ya puse tiritas a mi maltrecho corazón.
la vida nada en un vaso de alcor,
a mi azotea le han salido ya las canas,
ya puse tiritas a mi maltrecho corazón.
Lo que soy ya se lo he gritado al
destino,
ya no sueño metas para cumplir,
se bien quien es el verdadero asesino,
y porque debo vivir o morir.
La casa que habito no cabe en mis
sueños,
el paraíso no tiene en ella ya una habitación,
de repente pase de ser joven a ser viejo,
traicionado y asesinado por un reloj.
el paraíso no tiene en ella ya una habitación,
de repente pase de ser joven a ser viejo,
traicionado y asesinado por un reloj.
No hay comentarios:
Publicar un comentario