me siento a observar y sentir el mundo,
dejando pasar con monotonía las horas,
buscando la inspiración en el fondo de
mi pecho.
Dejo transcurrir cada minuto,
como si fuese mágico y eterno,
escuchando y sintiendo cada sonido,
perdiéndome en la luz y sus colores
intensos.
Me dejo transportar con mi imaginación,
hasta el lugar que he inventado y vive
en mi sueños,
donde vuelo en libertad mas allá de la
vida,
mas allá de los lienzos,mas allá de
los verbos.
Y así doy vida a mi universo,
que vive y mora en mi interior,
como si fuese un lugar eterno,
sin preocuparse del ayer,el mañana o
el hoy,
como si en el no existiera el tiempo.
Hay dejo flotar mi cuerpo,
con mis manos extendidas e inertes,
como si no hubiese otro lugar mas
cierto,
que este en el que estoy y la paz que
siento.
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