La noche llega fría y desnuda,
como llegan las cosas que tienen fin,
entre tu cama,tu piel y la mía,
distanciadas del uno al otro confín.
Cayo el telón de la verdad y el
desamor,
y los cuerpos se visten sin abrazos,
en un salto al vacío sin corazón,
entre lo real,cruel y lo insensato.
A la mañana la parimos con lagrimas,
acompañada de lamento y dolor,
nacida con orgullo y rabia,
gritando venganza desde el interior.
Nuestros labios ya no se buscan y
retan,
nuestros ojos no quieren ya ver,
no hay letras,ni emociones para el
poeta,
y nuestras lenguas solo juegan a ser
cruel.
La vida pasa errante y solitaria,
cada uno en su casa y su habitación,
con nuestros dedos mudos y sin alma,
buscando otra piel y su redención.
Antes volábamos sin miedo,
ahora todo es monótono,mundano y
terrenal,
antes vivíamos el amor con pasión y
misterio,
ahora nos arropa el alma la sinrazón y
la oscuridad.
Ya no suenan gemidos de placer,
ni hay vida en nuestra habitación,
las horas se hacen eternas,mudas y
cobardes,
dejando soledad y odio en nuestro
corazón.
Nuestros labios ya no se buscan y
retan,
nuestros ojos no quieren ya ver,
no hay letras,ni emociones para el
poeta,
y nuestras lenguas solo juegan a ser
cruel.
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