No siempre fuimos uña y carne,
no siempre comprendí tus gestos,
no siempre fuiste santa en mis
devociones,
no siempre reí tus chistes,ni entendí
tus hechos.
No siempre cuidamos nuestra amistad,
no siempre nos dijimos lo que nos
gustaría escuchar,
no siempre supimos que decir,
no siempre te acordaste de mi,ni yo de
ti.
Pero te digo hermana mía,
que cuando las cosas te vayan mal,
si me necesitas hay estaré,
a tu lado con cariño,amor y amistad.
Y aunque a veces no me quieras hablar,
este amigo tendrá la mano tendida
siempre,
con respeto y sinceridad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario